sábado, enero 31, 2009

¡Qué barbaridad!

La ola de calor que sacude el sur de Australia se incrementó en varios grados en la madrugada del jueves al viernes. Esa noche entrará en la leyenda del tenis, porque, entre otras cosas, ya ostenta el record del partido más largo jugado en el grand slam austral: 5 horas 14 minutos.

Casi las dos de la madrugada y nadie se movía del asiento. La Rod Laver atestada y dos antípodas pegando palos, corriendo, devolviendo bolas y escribiendo uno de los encuentros más bonitos, disputados y agotadores que se recuerdan.

Se llevaban cuatro horas de partido cuando, en el cuarto set y con empate a 4 en el marcador, Nadal y Verdasco regalaron al respetable una especie de maratón concentrado en menos de un minuto.

Nadal corría de punta a punta, varios metros detrás de la línea que demarca la pista, devolviendo los palos que le mandaba Verdasco a las esquinas. Devolvió una bola imposible, se resbaló y se recuperó como pudo. Fernando se la colocó a la velocidad de un misil en la otra esquina y se produjo el milagro de la bilocación: Rafa apareció en la otra esquina y colocó un punto ganador: la grada en pie aplaudiendo. Se había producido otra “nadalada”, la madre de las “nadaladas”.

Los tenistas se sonreían, un poco como lobos alfa, a cada lado de la red.

El set, como el primero y el tercero, acabó con la muerte súbita. Ni el cansancio de que dio muestras Verdasco en esta manga fue suficiente para que renunciara. Se adjudicó el set. Y a que el público disfrutara una horita más, aunque ya eran las tantas.

No hay quinto malo, como en los toros. Y dado que no hay muerte súbita, y de nuevo con 4-4 en el marcador, parecía que el encuentro duraría hasta que uno de los dos contendientes se mantuviera en pie. Verdasco tuvo una ventaja de 30-0 al resto en el novena juego del partido, pero Nadal estaba dispuesto a salir vivo del partido, a enfrentarse a Federer en la final, aunque fuera con muletas.

Y ganó el juego que puso el 5-4 en el marcador. Un juego que le dio alas y, por el contrario, a Verdasco le afectó. Con su saque se puso 0-40. Tres bolas de partido, de las que recuperó dos. Hasta el ojo de halcón tuvo que dirimir un punto ajustadísimo que cayó del lado de Rafa. Como fuera, Verdasco tenía que empatar el juego. Y su saque, que le había funcionado a la perfección hasta el momento, le falló. Una verdadera pena que fuera una doble falta la que puso punto y final a un partido de leyenda.

Lo cierto es que los dos merecían estar en la final, que tendrían que haber ganado los dos, porque el partido se decidió por un único punto. Un partido en el que se pusieron en juego casi 400 puntos. Ese minúsculo detalle fue decisivo. 193 puntos ganó Nadal por 192 de Verdasco.

La clave estuvo en los errores no forzados. Demasiados para el madrileño, que en ese capítulo triplicó los cometidos por Nadal: 25 por 74. En puntos ganadores, sin embargo, Verdasco duplicó el cómputo del número 1: 52 a 95.

Pero, sobre todo, en los puntos decisivos. Verdasco concedió 20 puntos de ruptura por sólo 4 de Nadal. Demasiados. El porcentaje dice que el madrileño es mejor, aprovechó la mitad, pero la estadística es engañosa. Uno ganará el 50% y el otro sólo el 20%. Pero el 50% es 2 y el 20%, 4.

Nadal va a llegar fundido a la final, pero tiene a favor dos cosas: su fantástico fondo físico y su ambición. Sería el primer español en ganar un grand slam, un hecho histórico. Pondría en su palmarés uno de los dos grandes que aún le faltan.

Pero en el otro plato de la balanza está la determinación de Federer de sobrepasar a Sampras en grandes ganados e, innegable, el maravilloso tenis que atesora.

martes, enero 27, 2009

Federer humilla a Del Potro

Se podrían hacer muchos juegos de palabras: “Del Potro, domado”. Pero un 6-3, 6-0 y 6-0 en 1:20 minutos de partido (el último set duró 19 minutos) es más que un serio correctivo, es una humillación en toda regla.

La juventud de Del Potro, 20 años, se enfrentó al tenis más riguroso y efectivo del tenis. Y su descaro de otros encuentros no fue suficiente ni para hacer pestañear a Federer.

En muchas ocasiones, los jóvenes jugadores afrontan partidos similares como si fueran a recibir una lección magistral; otros van con la esperanza de dar la sorpresa. Del Potro salió apaleado de la pista: le sacó Federer a raquetazos.

El suizo jugó perfecto, después del susto que le dio Berdych. Parecía como si quisiera demostrar que los dos sets que tuvo que remontar ante el checo fueran un accidente. No dio la más mínima oportunidad al argentino: no le concedió ni una bola de ruptura. No tuvo la menor posibilidad.

Por el contrario Federer dispuso de once bolas de rotura y convirtió siete. Una en la primera manga y las otras seis en los siguientes, en los que Del Potro fue incapaz de hacerse con ningún juego. Un marcador que sugiere que al otro lado de la red no había nadie.

La semifinal por la parte baja del cuadro se completa con Andy Roddick, tras el abandono del campeón vigente, Novak Djokovic. Nole se retiró en el cuarto set. Se adjudicó el primero en la muerte súbita, pero los dos siguientes cayeron con claridad del lado del americano. Las elevadas temperaturas que ayer cayeron sobre la Rod Laver parecen las causantes del bajón físico del serbio, que no podrá defender título.

En el cuadro femenino, se confirma la primera semifinal rusa: Zvonareva y Safina derrotaron respectivamente a Marion Bartoli y la hija pródiga australiana Dokic, que plantó más resistencia. Pero Safina, como ocurrió en su anterior enfrentamiento contra Alize Cornet en el que tuvo que remontar un 2-t en el tercer set, se agarró a la pista y eliminó al último representante del país anfitrión.

lunes, enero 26, 2009

Verdasco acaba con las esperanzas de Murray

Un sorprendente Verdasco ha terminado en cinco mangas con las esperanzas de Murray de adjudicarse su primer gran slam. Murray, que aparecía como el tenista más en forma y el más peligroso en el Open de Australia, perdió un partido extraño por lo abultado de los marcadores en los tres primeros sets: 6-2, 1-6, 6-1, 3-6 y 4-6.

Murray debe estar dando vueltas a su derrota, cuando tuvo menos errores forzados, más puntos ganadores y el mismo número de bolas de rotura convertidas. Todos los porcentajes estadísticos resultaron favorables al escocés y, sin embargo, el marcador final le señala como perdedor.

Murray estuvo muy bien cuando ganó el primer y el tercer set, pero muy mal en los restantes y, por el contrario, Verdasco estuvo muy bien en las oportunidades que tuvo. En el último set sólo Murray tuvo dos bolas de ruptura que no supo aprovechar. Verdasco, sólo una y la convirtió.

Nadal no tuvo ningún problema para superar a González, quien llegó mermado físicamente al encuentro tras el desgaste sufrido contra Gasquet: 6-3, 6-2 y 6-4 en un partido que no llegó a las dos horas. Ahora Rafa tendrá que enfrentarse a Gilles Simon y es de esperar que se sienta motivado tras la derrota que el francés le infringió en el pasado Master Series de Madrid.

Carla Suárez confirma su buen estado de forma tras derrotar a Anabel Medina por un contundente 6-3, 6-2 y espera a Dementieva en cuartos de final, una ronda en la que cuatro de las ocho jugadoras son rusas. Si la canaria mantiene el nivel, hay esperanzas de que esté en semifinales.

domingo, enero 25, 2009

Federer sufre para ganar

Roger Federer tuvo que emplearse en la última jornada del Open de Australia para ganar su enfrentamiento contra Thomas Berdych. El suizo tuvo que remontar dos sets en contra, algo a lo que no está acostumbrado. Más de tres horas tuvo que emplear Federer para doblegar al checo y adjudicarse el partido más difícil que ha tenido en las pistas del Merlbourne Park: 6-4, 7-6, 4-6, 4-6 y 2-6-

Roger tuvo que apoyarse en su saque para neutralizar a Berdych, hasta apuntarse 20 saques directos. Este fue uno de los argumentos para adjudicarse el duelo, ya que el partido se decidió por pequeños detalles, ya que tanto en errores no forzados como en golpes ganadores, el juego estuvo muy igualado. Otra de las claves del triunfo fue un Federer más efectivo en la red y que Roger no desaprovecha las posibilidades de rotura.

Le espera en octavos Del Potro, quien no debería presentarle mayor problema, a no ser que haya quedado tocado físicamente tras un partido inusualmente largo para lo que Federer acostumbra.

Un pequeño susto se llevó Novak Djokovic ante el que fuera finalista hace un par de años, Bagdhatis. El chipriota no empezó a jugar hasta el sexto juego del primer set, y gracias, porque estuvo a punto de ver un rosco en su marcador. Una vez despierto, Bagdhatis consiguió llevar el segundo set al desempate, que perdió.

Se mostró más agresivo en el tercero –rompió de inicio el servicio del serbio- y más errático Djokovic –debe ser que todavía no controla el efecto de su nueva raqueta-, manga que acabó, de nuevo, en la muerte súbita. Un desempate plagado de errores por ambas partes y que acabó adjudicándose el chipriota.

Debió verle las orejas al lobo Nole, porque ya en el cuarto set no se permitió frivolidades y casi repite el marcador de la primera manga. El marcador final mostraba un 6-1, 7-6, 6-7 y 6-2 en tres horas y media. El partido terminó pasadas las dos de la madrugada hora local.

Fue un partido que se decidió por los errores y no por los aciertos, que se dieron con cuentagotas. El partido puso a prueba al público, eso sí, entregado y bullanguero, dividido entre serbios y chipriotas. Una audiencia menos fanática se hubiera ido a la cama antes de acabar el primer set.

A Djokovic le espera en octavos Roddick. El americano –que despachó en tres sets a Robredo- no le dará tantas facilidades.

sábado, enero 24, 2009

Para ganar, además de bueno, hay que ser consistente

No es suficiente tener un buen tenis, arriesgar y dejar boquiabiertos a los espectadores con golpes espectaculares. Además hay que ser consistente. Richard Gasquet desplegó contra Fernando Rodríguez un juego preciosista, casi olvidado en las pistas. En los dos primeros sets, el revés prodigioso del francés hizo inútil la derecha demoledora del chileno, que acabó llevándose un partido casi interminable por 6-3, 6-3, 6-7, 2-6 y 12-10

Pero a Gasquet le falta algo. Puede que instinto ganador, fondo físico o contundencia. Con el partido encarrillado, el tercer set se le puso cuesta arriba, aunque logró igualar el marcador para llegar a la muerte súbita. Una vez allí, con continuos minibreaks a favor de uno y otro e incluso con bola de partido, entregó la manga.

La cuarta manga fue un recital de González y la quinta un juego de poder a poder. Nada menos que 22 juegos se tuvieron que solventar –no sin varias bolas de rotura especialmente a favor del francés- para que el subcampeón de los pasados Juegos Olímpicos pasara de ronda.

De hecho, en ese último set que rozó la hora y media de duración, Gasquet ganó más puntos que su rival, pero González supo adjudicarse los decisivos. El francés dispuso de cinco bolas de rotura que fue incapaz de convertir, mientras que el chileno supo adjudicase el partido con la tercera que tuvo.

Gasquet desarrolló un juego preciso y ya casi olvidado, subiendo a la red continuamente, voleando con solvencia y regalando a la grada unas voleas altas de revés que recordaban al último gran ídolo australiano, Pat Rafter.

Pero no fue suficiente. González llegará a su próximo encuentro, contra Nadal, mermado físicamente tras un partido interminable y de enorme desgaste físico. Ambos jugadores tuvieron que ser atendidos varias veces por las asistencias médicas, y ambos salieron del partido con los pies destrozados por las llagas.

Mientras ellos se desfondaban, en la pista de al lado Nadal machacaba a Tommy Haas con un 6-4, 6-2, 6-2. El mallorquín perdió el primer servicio, desatando las alarmas. En el juego siguiente recuperó el juego perdido y puso en práctica todos los golpes que atesora. Se mostró agresivo, no dudó en subir a la red y volear y su revés a dos manos ha mejorado sensiblemente.

En menos de dos horas se adjudicó un partido al que, a excepción de ese servicio inicial, siempre tuvo de cara. Hasta se permitió cuatro saques directos. Las estadísticas del partido arrojan unos datos contundentes: 8 errores no forzados por 25 del alemán y 53 golpes ganadores por 25 de Haas. Eso sí, su porcentaje de conversión de bolas de rotura puede mejorar. Dispuso nada menos que de 18 puntos de break y sólo convirtió un tercio, más que suficiente ante la única oportunidad que concedió a su rival.

Murray, por su parte, sigue sólido y sin especulaciones. El austriaco Melzer sólo plantó cara en el primer set, que ganó el escocés por 7-5. El siguiente marcador fue un contundente 6-0 y en el tercero, aunque Melzer hizo un amago de recuperación, acabó del lado de Murray por 6-3.

El resto de la parte alta del cuadro femenino arroja las victorias de Gael Monfils ante Nico Almagro y la trabajada de Guilles Simon frente al croata Mario Ancic y el triunfo aplastante de Verdasco en tres sets, dos de ellos en blanco, ante Stepanek. James Blake despachó a Igor Andreev en cuatro set y el cuarto francés que ayer se jugaba el pase a cuarta ronda, Tsonga, también tuvo que llegar a la cuarta manga para deshacerse del israelí Sela.

En el cuadro femenino, Carla Suárez ganó sin problemas a Mª José Martínez y Anabel Medina lo hizo ante una siempre correosa Penetta. En cualquier caso, tendremos a una española en cuartos de final, ya que ambas se enfrentarán en la próxima ronda.

jueves, enero 22, 2009

El elegante juego de Carla Suárez desarbola a Venus


A la canaria le gustan los grandes. Es en los grand slam donde pone en práctica el elegante y efectivo tenis que atesora. Hoy ha sido capaz de dar la vuelta a un parcial de 6-2 favorable a Venus, adjudicarse el segundo set con seguridad y acabar con la norteamericana cuando sacaba para ganar el partido, en su primera aparición en Melbourne.

Una desconcertada Williams fue incapaz de ganar con un 5-3 arriba en el tercer set y bola de partido. Tan incrédula estaba que le faltó el canto de un duro para celebrar el triunfo tras una bola que se le fue de pista unos centímetros. Y a partir de ahí, golpes erráticos a bolas asequibles que pusieron un 5-6 y servicio a favor de Carla.

La joven tenista canaria erró el primer punto y quizá Venus, con el 0-15 tuvo un atisbo de esperanza. Pero Carla sujetó los nervios y dio un auténtico recital, a pesar de fallar una de las dos bolas de partido de que dispuso.

Exultante, Carla Suárez, ante el speaker, demostró que su inglés es manifiestamente mejorable. Pero se ganó las simpatías de la grada de la Rod Laver, cuando a todas las preguntas, y con cara de no entender nada, sólo acertaba a contestar: “Thank you”.

Carla desplegó su mortífero revés a una mano siempre que tuvo ocasión. España tiene una tenista a la que da gusto ver en la pista. Un juego efectivo, sin especulaciones y francamente bonito; un juego de golpes ganadores que siembra de incertidumbre a su rival. Porque había que ver la cara de Venus en los dos últimos juegos del partido, sin entender qué demonios estaba pasando para que no le entraran los primeros, cometer dobles faltas, dejar las bolas en la red o no meterlas en la pista.

Confiemos en que la canaria sepa mantener ese juego que ha desbancado a una de las favoritas del cuadro femenino, como ya hiciera el pasado año en Roland Garros ante la gran favorita del público, Amelia Mauresmo, torneo en el que alcanzó los cuartos de final.

sábado, enero 17, 2009

Tradiciones insensatas

En un par de días se celebrará la toma de posesión de Barak Obama, 44º presidente de los Estados Unidos. Debió ser Jefferson el primero en hacerlo en Washington, ya que hasta 1800 no se erigió el Capitolio. Los anteriores presidentes, Washington y Adams, tomaron posesión en Filadelfia.

La historia y la tradición norteamericanas son escasas, pero le tienen mucho aprecio. Porque de otra manera no se explica que se mantenga un rito que cualquier mente actual calificaría de insensato.

Tomar posesión al aire libre el 20 de enero supone arriesgarse, en el mejor de los casos, a pillar un trancazo de primer orden. La previsión meteorológica prevé una temperatura máxima de 1º y una mínima de 7 bajo cero. Ideal para pasar varias horas tomando la fresca.

Además es, como digo, al aire libre. Esto significa –tal y como está el patio y el nivel de paranoia americana- unas medidas de seguridad sin parangón. Según aseguran en los medios informativos, el tráfico en todo el Capitol Mall y alrededores (vamos, casi todo el DC) estará tomado por el Ejército y las diferentes agencias federales de seguridad.

Los que quieran asistir a la toma de posesión tendrán que ir a pie hasta el centro y atravesar un buen número de controles de seguridad. Señoras, no lleven tacones.

Si no estuvieran aferrados a este ritual, la toma de posesión, se haría a cubierto, lo que ahorraría el despliegue de personal armado y el gasto en antipiréticos.

Obama, además, quiere reproducir algún episodio histórico, como es su llegada en ferrocarril, tal y como hiciera en su día Abraham Lincoln . Es lógico pensar que ese trayecto también será objeto de vigilancia, tanto en las vías como en las estaciones. Más despliegue de seguridad.