domingo, noviembre 30, 2008

El artífice de mitos

Jorn Utzon ha muerto con 90 años. Utzon es el artífice de un mito. Un mito que le dio muchos quebraderos de cabeza y del que durante largo tiempo repudió. Utzon casi fue declarado persona non grata a cuenta de su obra.

Una obra que hoy día es una de las más reconocibles del mundo: la ópera de Sidney. Como otros edificios ambiciosos, la ópera de Sidney se fue de presupuesto, con problemas constructivos y retrasos de la entrega. Finalmente Utzon fue despedido y el interior fue proyectado por otros arquitectos. Sin embargo, algunos años más tarde Utzon fue de nuevo llamado para reformar el interior que él no había proyectado para introducir mejoras acústicas.

El fallecimiento de Utzon y el inevitable recordatorio de su obra más célebre me lleva a proponer una especie de decálogo de los edificios del siglo pasado que en sí mismos representan una ciudad.

La ópera de Sydney, de Jorn Utzon
El Chrysler de Nueva York, William van Allen
El Transamerica Piramid de William Pereira en San Francisco
El Gungenheim de Bilbao, de Frank Gehry
La Sagrada Familia de Barcelona, de Gaudí
La Neue Gallerie de Van der Rohe en Berlín
El Axe de Norman Foster en Londres
Centro Pompidou de Renzo Piano y Richard Rogers, París

Y no me salen más, así que se queda en 8

Y no pongo las fotos de todos porque por alguna razón no puedo poner las fotos donde quiero.

martes, noviembre 25, 2008

Las razones de un fracaso


¿Cómo Argentina pudo perder la final de la Davis? Se ha repetido hasta la saciedad que esta era la gran oportunidad de los sudamericanos de hacerse con el prestigioso trofeo.

El sorteo les había favorecido para ser anfitriones de las eliminatorias. Jugar con la cancha a favor no es determinante, pero ayuda muchísimo. Sin olvidar, que el anfitrión decide la superficie y lo hace, evidentemente, para que le favorezca.

Así las cosas, y según la rumorología, bajo consejo de Nalbandian que es, sea cual sea su ranking, el líder del equipo, se decide por una superficie que perjudique a Nadal, es decir, una pista rápida. Olvidan, sin embargo, algunos hechos determinantes: Nadal es bueno en todas las superficies, mejor en tierra, pero juega bastante bien en pista rápida. Eso se comprueba sólo con dar un vistazo a los resultados del año.

Desechar la tierra batida como superficie también perjudica a los jugadores argentinos, a excepción, precisamente, de Nalbandian. Por otro lado, tanto Verdasco como López son jugadores que se adaptan mejor a las superficies rápidas que a las lentas. Feliciano, además, es uno de los pocos tenistas que todavía juegan saque/bolea, ideal para las pistas rápidas.

La baja de Nadal, sin embargo, echa por tierra toda esta estrategia. Lo que se había enfocado para perjudicar, supuestamente, el juego del número 1, ahora se había vuelto en contra del equipo argentino.

En el momento de elegir a los integrantes del equipo, el capitán argentino hizo más caso del ranking que del estado físico y de juego de sus tenistas. Así mantuvo como número 1 a Del Potro, quien a pesar de sus problemas en los pies decidió jugar la Master Cup en Shangai, dónde sólo ganó uno de sus tres partidos.

Del Potro no quiso sacrificar su primera participación en la Master, decisión suya, pero sabedor de su estado el capitán debería haber reflexionado sobre su inclusión en el grupo.

Así que el primer día el resultado es un bofetón para el equipo argentino. Nalbandian gana a un alicaído Ferrer (tampoco se entiende su inclusión en el equipo español por parte de Sánchez Vicario dada su baja forma en la última parte de la temporada) y Del Potro da la sorpresa perdiendo frente al poco fiable López que, por una vez, hizo un partido para enmarcar. A ver si le dura.

El segundo bofetón lo recibe el equipo argentino el sábado. Su dobles, formado por Nalbandian y Calleri, cae estrepitosamente ante la pareja Verdasco-López, quienes llevan entrenando desde hace tiempo y cada vez están más compenetrados. La facilidad de López para jugar cerca de la red y su potente servicio le hacen un excelente doblista. Además, los dos son zurdos, lo que convierte su juego en un martirio para los contrarios.

La derrota del dobles destapa las miserias del equipo argentino, donde Nalbandian en un arranque de furia, dicen, tiene más que palabras con Calleri; se marcha del estadio sin asistir a la obligatoria rueda de prensa y los rumores de reproches hacia Del Potro, a quien responsabilizan de la primera derrota.

Para solucionar el desaguisado, al capitán argentino sólo se le ocurre convocar para el decisivo cuatro partido al Acasuso, un buen chaval donde los haya, pero de tenis asequible. Ocupa el puesto 48 en el ranking y su mejor posición ha sido el 44. Un jugador de buen saque, buena derecha y pobrísimo revés. Un jugador que, encima, ya tenía el estigma de haber perdido hace dos años la segunda final Argentina en el quinto partido contra los rusos.

Parecía que Mancini sacaba a la cancha a una víctima propiciatoria, que tiraba la toalla, que no quería saber nada de ganar la Davis.

Acasuso hizo todo lo que pudo, ganar dos sets y regalar a su público algunos puntos preciosos. Puso contra las cuerdas a Verdasco, tan acelerado e irregular como de costumbre, pero que finalmente encontró el filón de jugarle al revés y, poco a poco, desgastarle físicamente hasta la extenuación.

domingo, noviembre 23, 2008

La tercera ensaladera es nuestra

Una buena preparación física ha sido clave para ganar la tercera Copa Davis. Lo cierto es que pocos apostaban por la victoria: partidos en terreno hostil; una pista rápida construida para perjudicar al número 1; ausencia de éste por lesión y un rival decidido a llevarse de una vez por todas la ensaladera que en dos ocasiones ya se les había escapado de las manos. 6-3 6-7 4-6 6-3 y 6-1 en el marcador final

El partido de Verdasco y Acasuso empezó con muy buenos augurios para el español, haciéndose con el primer set con relativa facilidad. A partir de ahí el partido se puso cuesta arriba. El argentino sacó extraordinariamente bien y Verdasco cometió infinidad de errores no forzados, algunos realmente infantiles.

Cuatro veces, cuatro, esmachó Verdasco del lado que no debía y lo que debía ser punto a favor se volvió en contra, con un Acasuso capaz de alcanzar las bolas altísimas y convertirlas en ganadoras. Con roturas de servicio por ambas partes se llegó a la muerte súbita que se adjudicó el argentino.

El tercer set fue, de lejos, el peor que jugó Verdasco. Estuvo acelerado, nervioso, sin darse tiempo para sacar y aumentando la estadística de dobles faltas. Acasuso se vino arriba y hasta que ya no había remedio, el madrileño no puso en práctica la táctica que le debería dar la victoria.

Acasuso tiene un buen servicio –colocó 14 aces- y un golpe de derecha más que decente; pero su revés es manifiestamente mejorable y trata siempre que puede de protegérselo. Un regalo para un rival zurdo como Verdasco.

Perdido el tercer set, Verdasco salió más decidido a la pista y ahí empezó la táctica de machacar el revés de Acasuso, aunque todavía tuvo buenas respuestas. Roturas y contrarroturas de servicio que, finalmente, se decantaron del lado español y puso el partido igualado a dos sets para cada jugador.

Pero Acasuso estaba ya fundido y Verdasco fresco como si acabara de salir a la pista. Hubo que asistir al jugador argentino de dolores en los abdominales y la rapidez en sus piernas se había evaporado y, para más escarnio, Verdasco restó muy bien. Así se llegó al 5-1 en el marcador y servicio para Argentina.

A esas alturas del partido, hasta los jugadores que tenían programado el quinto encuentro sabían que no iba a celebrarse: Feliciano López y David Nalbandian ocupaban sillas al borde de la pista. Uno nervioso y el otro resignado.

Dispuso Verdasco de dos bolas de partido contra el servicio de Acasuso y convirtió la segunda con un golpe magistral en la misma esquina de la pista que hizo inútil la carrera del agotado argentino.

Lo demás, ya son emociones. España suma en ocho años su tercera ensaladera, la primera como visitantes y, para más mérito, sin su mejor jugador.

sábado, noviembre 22, 2008

Pura emoción en la final de Copa Davis


Ha sido un partido tópico: de infarto. El dobles de la final de Copa Davis entre Nalbandian/Calleri, por el lado argentino, y López/Verdasco, por el equipo español, fue pura emoción, griterío de la grada incluido. Pero así es una Davis, aunque, todo hay que decirlo, sin insultos como los que se han oído en el polideportivo Islas Malvinas de Mar del Plata.

El partido empezó mal para los españoles, con un primer set que se adjudicó la pareja argentina cuando se perfilaba la muerte súbita: 7-5. En el segundo, se repitió la historia, pero con los protagonistas cambiados: el mismo marcador para los españoles.

Y el tercero, ese fue el SET. Verdasco y López se pusieron 5-1 en el marcador, con dos roturas a favor. La grada albiceleste se quedó muda y los jugadores argentinos medio deprimidos. Lo que parecía un coser un cantar se convirtió en cuatro juegos consecutivos perdidos por la pareja española. La hinchada argentina resucitó con fuerzas renovadas, gritos, cánticos … Afortunadamente, los españoles consiguieron mantener su saque y garantizarse la muerte súbita, que llegó finalmente.

No empezaron bien López/Verdasco, que se vieron inmediatamente con un mini break en contra y un 5-1 a favor de la pareja argentina. A estas alturas, la grada rugía y fue necesario apercibir a los seguidores del equipo austral. Los seguidores de uno y otro equipo tuvieron un comportamiento poco deportivo que acabó provocando una doble falta de Nalbandian. El set se resolvió con un 7-5 a favor de los españoles.

El mazazo acalló de nuevo a la grada y el jarro de agua fría, tras la épica remontada que los argentinos no consiguieron cerrar, el cuarto set se jugó con más tranquilidad.

El dobles español rompió dos veces el servicio de sus rivales, que recuperaron uno. Parecía que se iba a repetir la historia del tercer set, pero tanto Verdasco como López mantuvieron la serenidad y volvieron a romper el saque de los argentinos: 6-3 en el cuarto y segundo punto para España en la eliminatoria.

Fue un partido de los que hacen afición, aunque el dobles nunca llene las pistas de tenis, salvo cuando se trata de la Davis.

Mañana se juegan los dos últimos puntos con un ambiente bien distinto del primer día, donde todos los vaticinios auguraban una victoria argentina. Ahora ya no está tan claro, con Del Potro fuera de juego. Nalbandian jugará el segundo partido, lo que tampoco son buenas noticias, ya que Calleri, probable sustituto de Del Potro, quedó hoy tocado tras la derrota del dobles.

Veremos qué decide Sánchez Vicario. López parece intocable tras sus dos grandes partidos. Ferrer no está bien y lo normal sería tratar de amarrar el tercer punto y que el cuarto partido sea una mera formalidad.

Sorprendente Feliciano


Feliciano López es un tenista que no inspira confianza. Lo tiene todo para ser un gran jugador en base a un saque potente y una gran efectividad en la red. El problema es que tiende a desinflarse y acumular errores no forzados. Sin embargo, en su partido contra Del Potro estuvo perfecto.

Feliciano jugó probablemente su mejor partido. A pesar de perder el primer set contra el gigantón argentino, mantuvo la concentración y no se desanimó en el segundo, que consiguió llevar a la muerte súbita y ganarla con mucha solvencia. Con un 1-1 en el marcador, el partido se transformó en pura emoción.

López consiguió restar los misiles que lanzaba Del Potro –colocó 24 puntos de saque directo frente a los 17 de Feliciano- y cuando disponía él del servicio se lanzaba a la red, donde remataba los puntos, hasta llegar al final del tercer set y, de nuevo, muerte súbita, ya que no logró convertir ninguna de las dos bolas de ruptura de las que dispuso. Se adjudicó el juego decisivo ante un Del Potro cada vez con más dudas.

El cuarto set empezó igualado, pero por fin Feliciano pudo romper el servicio del argentino, aunque la alegría duró poco, ya que entregó el suyo a continuación. Sin embargo, una bola casi imposible de alcanzar provocó un estiramiento excesivo de la pierna derecha de Del Potro, que exigió asistencia.

El argentino –que ha arrastrado problemas físicos en sus pies, aunque prefirió posponer una operación para poder jugar la final de la Davis- parecía entregado, a pesar del bullicioso público que atestaba el polideportivo Islas Malvinas.

Feliciano le rompió de nuevo el servicio y ganó de forma inapelable, con un juego bonito y efectivo en la red: ganó 20 puntos en la red, contra 4 de su oponente. La estadística del partido lo dice todo: López sacó mejor, hizo más puntos ganadores, cometió menos errores no forzados y restó con más efectividad que su oponente. En resumen, el partido de su vida, como él mismo reconoció.

Tras el desastroso partido de Ferrer, López resucita las esperanzas del equipo español para el partido de dobles y, sobre todo, ante los encuentros individuales que restan, con un Del Potro mermado y, eso sí, un Nalbandian en estado de gracia. Si se gana esta complicadísima final, que duda cabe que habrá sido el artífice, el héroe, como en el 2000 lo fue Ferrero.
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Mal empieza la Davis para España

Con un contundente 6-3 6-2 y 6-3 David Nalbaldian ha solventado el primer partido de la final de la Copa Davis ante David Ferrer. Nalbaldian ha realizado un juego perfecto: contundente, preciosista en ocasiones y efectivo. Ferrer, por el contrario, nunca estuvo asentado en la pista y él mismo confesó, al concluir el encuentro, que no había dado la talla.

Ferrer no tuvo su día. Aunque habría que decir que no ha tenido su año. Y es una lástima. Ni poniendo la quinta marcha a sus piernas consiguió poner en apuros al argentino y siempre fue por detrás a lo largo del partido.

Las dos veces que pudo romper el servicio de Nalbaldian y acortar distancias, se vio incapaz de confirmar el break. Llegó a tener hasta nuevo bolas de ruptura, pero sólo pudo aprovechar dos, mientras su rival rompió siete veces el servicio.

Nalbaldian mantuvo un alto porcentaje de primeros servicios y Ferrer no fue tan contundente en el resto. El argentino obtuvo algunos restos directos memorables que acabaron por desquiciar a Ferrer.

En el tercer set parecía que Ferrer iba a mostrarse más agresivo, menos temeroso y con menos dudas. Pero duró un par de juegos, hasta que consiguió una rotura de servicio y entregó el suyo a continuación casi sin oposición.

Es posible que Sánchez Vicario haya querido dar a Ferrer un margen de confianza y dar más importancia al ranking, pero una paliza como la que recibió en Mar del Plata no hace más que acentuar las dudas sobre su nivel de juego. Ferrer estaba desolado, enfadado consigo mismo y, finalmente, resignado. Sabía que muchas de las esperanzas estaban puestas en él y haber sido derrotado de forma tan aparatosa no le hace ningún bien.

Cierto es que la sola presencia de Nadal da confianza, pero es necesario reconocer que sin el mallorquín, la escuadra española parece destinada a naufragar.

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miércoles, noviembre 12, 2008

El riesgo de Obama

Las grandes esperanzas suelen derivar en grandes decepciones. Está todo el mundo alborotado con el triunfo de Obama en las presidenciales de Estados Unidos. Todos esperan un cambio, todos esperan que Obama lidere una vuelta a la política humanística, entendida como una política para el pueblo y no las corporaciones. Una política más doméstica y menos hegemónica. Una política menos agresiva y más dialogante.

Sin embargo, la situación que deja la administración Bush (y digo la administración y no su presidente, porque estoy convencida de que ha sido un mero títere manejado por los grandes conglomerados energéticos y armamentísticos a los que su padre no es ajeno) es tan catastrófica que cualquier arreglo será sumamente complicado.

Una debacle financiera que se ha saldado con unas medidas impensables para cualquier gobierno ultraliberal: las arcas estatales corren a socorrer a los malversadores, dilapidadores y malos administradores. El dinero no va para los que tienen que hacer frente a las hipotecas, sino para los que han concedido préstamos sin garantías.

Un país sin sanidad pública, en la que los seguros privados además de caros llevan tal cantidad de salvaguardas que tratarse de una enfermedad un poco fuera de lo común queda excluida del seguro. Sólo los mayores de 65 años tienen derecho a la asistencia gratuita. Si consiguen sobrevivir hasta esa edad, claro está.

Un país donde las pensiones están en manos privadas, sin supervisión ni control, tal y como demuestran las malversaciones de fondos en grandes corporaciones como Enron, que dejaron sin cobertura para la vejez a miles de empleados, los ahorros de toda su vida laboral.

Un país donde todavía se discute si hay que enseñar a Darwin en las escuelas o eso del “diseño inteligente”, pero se prohibe la investigación genética. Un país donde la investigación médica y farmacéutica se concentra en la cosmética.

Un país que ha iniciado dos guerras sin visos de tener final, que suponen una sangría humana y económica, aunque en ese segundo aspecto hay quienes sacan jugosos beneficios.

El desafío que tiene Obama es enorme y exigirá enormes recursos. El peligro de fracasar esta ahí, aunque ni él ni su administración sean los responsables de la situación a la que se enfrentan.

Chencho Arias ya lo advirtió: es casi inevitable que Obama decepcione al mundo.

El único que debe respirar aliviado es McCain.

martes, noviembre 04, 2008

Melendi pide asilo político


Entro en la web de elpais.es y me veo en portada una foto de Melendi bajo el titular “El hijo de Osama bin Laden pide asilo político en Barajas”. ¿Pero éste no era el que hizo aterrizar a un avión camino de México con una cogorza del 10?

Nada, que lo devuelvan y que cante allí sus chorradas.