Estábamos el otro día mi marido y yo viendo el telediario y, la verdad, daba agonía. Peña llorando a moco tendido porque ... llovía y no podía salir la procesión. Seres humanos, es un suponer, disfrazados con caperuzas moradas, blancas o rojo bermellón, todos resignados a dejar al santo en la iglesia y no poder demostrar su fé.
Y en estas comentamos: "Amos a ver, si eso lo ve alguien del FMI o del BCE, ¿tú crees que nos darán un euro?
Es que daba miedo, por ejemplo, ver a Loli Cospedal con teja, mantilla y vara de mando presidiendo la procesión de Toledo.
Miedo daba cualquier paso de semana santa custodiado por un tricornio charolado.
Pero lo que daba auténtico pánico era la procesión legionaria de Málaga. Unos tíos en manga corta desgañitándose, al borde del esguince cervical, sosteniendo brazo en alto al cristo de la buena muerte, con mucho prelado alrededor.
Ya te digo, si eso lo ve alguien civilizado, lo de Grecia se queda en un chiste.
3 comentarios:
Y si ven la cruz gamada en el brazo de uno de los legionarios, los alemanes nos van a rescatar a hostias.
Pues, Sra. Liddell, yo es que disfruto mucho cuando llueve en Semana Santa y les dan esos berrinches. Malo que soy.
Folken, ¿el tatuaje obligado no era el de amor de madre?
Ay, dilecto pcb, también disfruto como una enana cuando en ss, casi todas, la borrasca se cierne sobre ciudades jalonadas de cirios y playas levantinas.
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