jueves, junio 29, 2006

A ver si algunos toman ejemplo


Acaba de hacerlo de nuevo. Esta vez no era fácil: un especialista en hierba al que nunca se había enfrentado. Kendrick es el típico jugador de saque y volea. Un saque demoledor, con un segundo servicio tan letal como el primero.

Rafa ha perdido los dos primeros sets, el primero en el tie break, llevando una ventaja de dos mini-breaks, pero el americano le ha remontado.

Así que tocaba sufrir. Yo, francamente, veía un panorama horroroso. Así que cuando he visto que le rompía el servicio en el segundo set, he decidido seguir el partido a través del marcador simultáneo de la web de Wimbledon.

Ha empezado la remontada. Un nuevo tie-break que se ha adjudicado. Una rotura de servicio en el 4º set, cuando ya parecía que tendrían que ir al desempate y una nueva rotura en el quinto.

Es que había que ver al americano, con unos servicios imposibles de devolver, imprevisibles y le daba lo mismo sacar contra la derecha que contra el revés.

Por eso es admirable este chaval. Por la capacidad de sacrificio, por creer en que es capaz de afrontar la adversidad y salir airoso. Ha sido una prueba durísima, pero la ha superado. ¡A ver si aprenden otros!

©Reuters / D. Staples (de la fotografía)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Alicia Liddell! Menudo peazo blog que te has montado.

Bueno, que no vengo a hablar de deportes, sino a decirte que hace dos días leí las recomendaciones de tu librero sobre el lector perfecto y me las he apropiado sin tu permiso.

Te leo de vez en cuando, para aprender algo, que conste, que siempre viene bien.

Me voy de vacaciones este mes y tendré más tiempo para leerte. Te vigilo... :)

Muchos besos de zinnia.

Alicia Liddell dijo...

Ya era hora de que aparecieras, melona :)

No, si te entiendo y comparto tu desolación. Pero esos chicos para los que trabajas son así. Consuélate pensando que te has ganado no ya un cortijo, una hacienda argentina de miles de hectáreas en el cielo.

Estaré en Madrid el martes, pero me temo que me perderé en la T4, así que no podré verte.

Un beso muy grande y no desaparezcas.