Con Belphegor dejo, de momento, las series. Hubo muchas más que me gustaron, pero son más recientes y están en la memoria de casi todos. Citar por su originalidad algunas, como “Doctor en Alaska” y aquellos personajes extravagantes que habitaban en Cicely y que tanto chocaban a Joel, especialmente Maggie, cuyos novios tenían la desagradable costumbre de fallecer.
Doctor era una serie de personajes más que de historias. Ed, el joven indio que se cartea con Bogdanovich y otros grandes directores; Chris, ex delincuente redimido por la poesía; Marilyn, pasando del urbanita Fleischman y sus neuras mientras teje un interminable jersey; el arrogante Maurice … Doctor en Alaska es toda una galería de grandes personajes que por sí mismos ya merecerían su propia serie.
Expediente X fue la gran sorpresa durante algunas temporadas. Otras grandes series exigían auténtico fervor para seguirlas, ya que las emisoras de televisión solían ponerlas a horas imposibles. Tal es el caso de las primeras temporadas de Ley y Orden, cuando todavía no se había desdoblado en tres series. En aquellos primeros años contó como protagonistas a actores de la talla de Paul Sorvino, Jerry Orbach o Dennis Farina. Allí se fogueó –y ahora vuelve- Chris North antes de seducir a la empachante Carrie de Sex in the City. La serie contó con la presencia de la inconmensurable Dianne Wiest durante casi medio centenar de episodios.
Sin olvidar, claro está, el origen de todas las series de médicos que nos invaden actualmente y, para mi gusto, la mejor: Urgencias que supuso el descubrimiento del hombre más guapo de la galaxia, más conocido como el nuevo chico Martini, el chico Porcelanosa, el chico Nexpresso, el chico Toyota, el chico Corte Inglés … y ganador de un Oscar.
De otras ya he hablado en anteriores entradas, como “El ala Oeste de la Casa Blanca” o la británica “Sí, ministro”. De las británicas, además, destacar una realmente fantástica como fue “Alló, alló” y que venía a ser la versión british de “Los hombres de Hogan”. En este caso trataba de la ocupación alemana de un pueblecito francés plagado de resistentes y dónde René, el tabernero, tenía que lidiar con unos y otros y una suegra que no se levantaba de la cama. Genial. La serie fue producida por la BBC entre mediados de los 80 y principios de los 90 y tengo entendido que alguna autonómica la repone de vez en cuanto en horarios obscenos.
13 comentarios:
No puedo oir hablar de Doctor en Alaska si no es en el reclinatorio.
a mí me encantaba Doctor en Alaska, además la banda sonora era muy buena...Cuando oigo esa música, y no sé porque, me viene a la cabeza el arce que aparecía en algún momento por la pantalla, si no recuerdo mal..:)
De las británicas solía disfrutar con "Arriba y abajo" que,como se presume por el título, habla de las aventuras y desventuras de una familia bien y de sus empleados que vivían y trabajaban en la parte inferior de la casa. Un saludo!
me acabo de dar cuenta que hay un capítulo dedicado a la serie de la que te hablo...por no mirar bien!
Me voy a ver que dices. Un saludo!
a mi esa serie no que me moleste pero tampoco me entusiasma mucho
Doctor en Alaska me daba una placidez...
Pocas veces leí/escuché un adjetivo tan mejor cuadrado que inconmensurable para definir a Dianne Wiest.
Que hagas referencia a "Doctor en Alaska", a la que tanta gente venera, o a "Urgencias", ya comienza a convertir mis visceras en natillas. Pero al citar a "Alló, Alló", creo que ya tendría motivos para demandarte por quebranto emocional. Dios, cómo olvidar a espía inglés que sin hablar ni papa de francés se hacía pasar por gendarme. O a Michelle "de la resistencia". Por no citar a "soy yo" Leclerc...
Espero que no abandones por mucho tiempo esta serie de posteos sobre series en sepia.
Qué decir de Doctor en Alaska... es una serie única...
y George Cloney es impresionante, no sólo es buen actor (al estilo Cary Grant, ahí es nada) sino que es un brillante director y guionista, y con los años se hace más y más atractivo...
Casi que podríamos crear el club de fans de Doctor en Alaska, a tenor de los comentarios recibidos.
En cuanto a "Alló, Alló", como dice Alex, inolvidable. Aquellas chicas de la resistencia vestidas siempre con trinchera y boina ... y se me olvidaba ¡el enterrador!!!
Hablando de una galería de personajes inolvidables, ¿nadie se acuerda de Friends?
(En serio, es verla una y otra vez y no parar de reír).
Pues ... es que a mí Friends nunca me hizo mucha gracia. Me pasa lo mismo con Sex in the City. Bueno, ésta última la considero insufrible.
Alicia, permíteme coincidir contigo en el dictamen sobre Sexo en NY (o como se tradujera). ¿Qué se puede esperar de algo donde actúe esa pedorra nariguda de Sarah Jessica Parker?
En cuanto a Friends, reconozco que no me hizo especial gracia -sólo veía capítulos sueltos- hasta el año pasado. Fue entonces, instalados por fin en la Cosmocueva, cuando Lucía y María me adentraron en ese absurdo mundo de no menos absurdas peripecias de lo cortidiano. Y de personajes entrañables (en el buen sentido, no en el de Médico de Familia), por supuesto.
Me estoy pensando, lo que son las cosas, un artículo en exclusiva...
Alló, alló, fantástica. Doctor en Alaska, sublime. Friends no me atraía lo más mínimo hasta un día que de pronto (no sé por qué, la verdad) me quedé viendo un capítulo y ¡zas! hasta el final. Hoy recuerdo a sus personajes con cariño.
en canal TNT,ponen Doctor en Alaska!!!!!!!!!!!!
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