En “Astérix en Britania” se contaba como había conseguido César conquistar la isla. César –históricamente- no conquistó Britania y la primera ocupación seria de la que se tiene noticia por parte del imperio romano fue la de Claudio. Pero bueno, pasando por alto la licencia histórica que se permitieron Goscinny y Uderzo, la historia de la conquista tenía su gracia.
Las tropas de César se sentían frustradas y desconcertadas cuando a las 5 de la tarde la batalla se suspendía por el “té de las cinco”, así como sábados y domingos, por aquello de la “semana inglesa”. Ante lo cuál César, según la misma versión, decidió atacar a las cinco de la tarde y los fines de semana, con lo que pronto terminó la campaña de conquista.
Empieza la segunda semana de Wimbledon, si es que ha habido primera. Porque dos jornadas completas no se pudieron celebrar debido a la lluvia (ya lo dije) y el resto de los días los parones han sido la tónica habitual.
El primer domingo de torneo, por tradición, no se juega. Es como el té de las cinco, vamos. A pesar del trastorno inmenso que supone tantísimos partidos aplazados, la organización de Wimbledon decidió mantener la tradición del descanso dominical. Hoy tampoco se juega, está diluviando.
La cuestión es que las previsiones meteorológicas anunciaban fuertes lluvias ... hasta el próximo jueves, pero ni aun así el empecinamiento británico se ha debilitado. Ni respeto a los jugadores ni respeto al público que ha pagado un dineral. El respeto a la tradición.
6 comentarios:
Cierto que César no conquistó Britania, pero el dijo que lo había hecho, al llegar a Roma, y todos le creyeron.
Sinceramente eso de la tradición me parece una estupidez. De seguir al pie de la letra las antiguas tradiciones Tiger Woods no habría ganado el Master de Augusta (la tradición no admitia socios negros), los "profesionales" no podrían competir en los Juegos Olímpicos (la tradición sólo entendía el deporte como una actividad amateur) y los equipos de fútbol que perdiesen a un jugador por lesión no podrían reemplazarlo por otro (las sustituciones se establecieron a finales de los años sesenta). Pienso que las tradiciones deben evolucionar y adaptarse a los tiempos, por muy british que sea uno.
La tradición que podrían recuperar es la de emitir el torneo en abierto. Accesibles para todos y no sólo una minoría. Hace años que sólo puedo ver las finales (y gracias) de Wimbledon.
Pues este año casi sólo se pueden ver finales de décadas pasadas. Me sé de memoria la que ganó Hingis a Jana Novotna o Sampras contra Boris Becker ...
Eso sólo demuestra que Goscinny y Uderzo SÍ hubieran conquistado Britania.
Saludos
Imagino que ya habrás leído, Alicia, los artículos de El País acerca de las quejas de los jugadores por el sistema británico.
Leído o no, es lo mismo: Nadal tiene pendiente un partido desde el sábado. Lo terminará mañana, miércoles, cuando tendrá que jugar el partido de octavos. Cuartos, para el jueves. Semis, el viernes. Y la final, con suerte, el domingo.
Siempre que la lluvia lo permita, claro.
Ale, ya está, después de 4 días ha ganado Nadal... sólo el quedan 4 partidos en 5 días (si no llueve, o la parada del té de las cinco no lo impide, claro)
¡Qué alivio!
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