miércoles, agosto 30, 2006

Mitomanía (III): Cary Grant


Lo admito, éste no entra dentro de los feos interesantes. Ni siquiera está vivo, pero a ver quien me niega que es el tipo con más clase que ha aparecido en una pantalla, aunque su extracción era del proletariado británico. Sus biógrafos aseguran que las penurias que sufrió en su niñez alentaron la tacañería cuando se convirtió en un hombre muy, muy rico.

Pronto se cumplirán 20 años de su muerte, y se conserva tan guapo como siempre. El mejor hoyuelo en la barbilla de la historia del cine, con permiso de Kirk Douglas, que siempre fue mucho más bajito.

Incuestionable pareja de Katharine Hepburn en las mejores comedias –Billy Wilder mediante- que se han filmado de los maestros Hawks o Capra. Ahí están “La gran aventura de Silvia”, “La fiera de mi niña”, “Vivir para gozar” o “Historias de Filadelfia”, un catálogo de diálogos y réplicas de insuperable ingenio. Y también de la mano de Howard Hawks la impagable “Luna Nueva”, con la magnífica Rosalynd Russell. Aunque como actor de comedia, qué quieren que les diga, está adorable en “Arsénico por compasión”, donde da una lección de que de espaldas también se actúa y él posee la espalda más expresiva.

Pero no sólo fue un magnífico comediante, también supo interpretar a personajes inquietantes como en “Sospecha”.

Absolutamente seductor, aunque sus personajes en muchas ocasiones fueran extremadamente torpes y despistados –añado a la lista “Me siento rejuvenecer”- estaba inconmensurable en “Encadenados”.

Hitchcock le convirtió en fijo de sus películas y su presencia contribuyó al éxito de las mismas.

Aunque sus tendencias sexuales se han puesto en cuestión –yo sostengo que sus matrimonios fracasaron por su extrema tacañería y, además, es igual, si fuera hombre también lo encontraría irresistible- hizo un memorable papel en “La novia era él”, donde se travestía de esposa soldado.

Su prestancia incluso en la madurez era tal que hacía perfectamente creíble a una jovencísima Audrey Hepburn enamorada en “Charada”.

Sólo recuerdo una película suya absolutamente boba y, sobre todo, falsa. “Noche y día”, en la que interpretaba a un asexuado Cole Porter. Luego Kevin Klein se encargó de descubrirnos la faceta loca del célebre compositor.

En 1941 recibe su primera nominación al Oscar por “Serenata nostálgica”, tres años más tarde por “Corazón en peligro” (dos títulos en su filmografía que apenas se recuerdan hoy) . Sólo obtuvo el galardón a título honorífico tres años después de su retirada del cine.
Se convirtió en catedrático de los papeles de identidad dudosa: Sospecha, Charada, Con la muerte en los talones, Encadenados … e incluso ese Mortimer de Arsénico por compasión que tampoco es quien cree ser.

Cary Grant nos dejó interpretaciones memorables de la mano de magníficos directores: Hawks, Hitchcock, Donen, Capra, Edwards o Mankiewicz. Interpretaciones que, cómo él decía, eran facilísimas: sólo había que decir el papel y no tropezar con los muebles. Aunque tropezara con ellos continuamente en sus personajes de sabio despistado.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Estás tocando mis puntos débiles... maravillosos actor y más buenas las pelis que has puesto... sólo te queda uno y habrás acertado con mis ídolos de celuloide... jajaja

Alicia Liddell dijo...

Mi santoral cinematográfico está bien provisto. Seguro que acierto.

desconvencida dijo...

Uno de mis actores favoritos... precisamente hace unos días hablé en mi blog de "Encadenados"! Un saludo

Alicia Liddell dijo...

Gracias por tu visita, Desconvencida. He leído su entrada sobre "Encadenados" y los comentarios. Es una película encantadora. Esa maléfica madre de Paul Raines es casi un calco de la señora Danvers, el ama de llaves de Rebeca

Miguel Sanfeliu dijo...

Un actor inmenso, indiscutible.
Y él siempre dijo (tengo entendido) que no le gustaba actuar.
Saludos

Alicia Liddell dijo...

Desde que enterró a Kafka me siento desconcertada.

Laura Diaz dijo...

Nuevamente coincido completamente con sus galanes del cine, y con el análisis que realiza.

También falta que hable de ... y hacemos lotería!

Saludos

pd. perdone a nuestro estimado Miguel- No creo que haya sepultado a K, simplemente necesitaba salir del anonimato.