miércoles, noviembre 29, 2006

Mitomanía (VII): Willem Dafoe

Ya dije en su día que me gustaban los hombres con caras … especiales. Nadie podrá negar que Willem Dafoe tiene un rostro inquietante. Vamos, que ese sí que podría hacer perfectamente de Jack el Destripador, por enlazar al albur con una entrada anterior.

La primera vez que vi su rostro en el cine me dije: “¡Vaya tela!” Ese tipo sí que tiene una cara rara, parece metida entre paréntesis. La película en cuestión es una verdadera joya: “Vivir y morir en Los Ángeles”, del enorme Friedkin. Desde luego no se me olvidó.

Con esos rasgos su carrera parecía –y parece- encaminada a hacer de villano, incluso a parodiarse a sí mismo en cosas como Speed 2, pero puede dar la réplica con toda propiedad a un Gene Hackman en “Arde Mississippi” en un papel magnífico de agente del FBI con conciencia.

Luego vendría ya una cierta celebridad tras el “Platoon” de Oliver Stone, inolvidable en aquel papel de sargento porrero.

Vietnam le perseguirá en “Saigon”, otra vez en el papel de policía que sigue machaconamente una investigación que nadie quiere.

Scorsese le elige para el papel de Cristo en su “Última tentación” y, por una vez, vemos a un Jesús más próximo a la estética de Velázquez que a la de Superstar.

No desdeña papeles secundarios ni alimenticios. Puede despeñarse con todo merecimiento y sin mover una ceja en cosas como “El cuerpo del delito”, teniendo como tal a Madonna, para luego deslumbrar en “El paciente inglés” o dar vida a Eliot en “Tom y Viv”.

Desde su debut en 1982 ha participado en más de medio centenar de películas, lo que le define como auténtico proletario del cine, que ya ha recibido dos nominaciones a los Oscars como mejor secundario.

18 comentarios:

pies diminutos dijo...

Me gustan estas entradas de tu blog dedicadas a tus mitomanías actoriles. Siempre me hacen pensar que a las mujeres nos cautiva más la personalidad que desprende un físico peculiar, que su belleza propiamente dicha.

el santo job dijo...

me encantó en arde mississipi, en esa escena en la que está a punto de pegarle un tiro a Gene Hackman.
solo por ella merece un premio chulo
lástima que tenga esa cara de desquiciao que te cagas
saludos!

Anónimo dijo...

Hola, buenas.

A no olvidar su interpretación de Bobby Perú en 'Corazón salvaje'. Concretamente la secuencia tórrida con Lula Dern.

Y eso.
ostrata.

Alicia Liddell dijo...

Hombre, Ostrata, ya era hora que te descolgaras con algún comentario, malandrín.

anilibis dijo...

Uno de sus primeros papeles fue una brevísima aparición en "El Ansia", donde le entraba a Catherine Deneuve en medio de la calle, o algo así. Fueron apenas dos o tres segundos, pero te aseguro que "te quedas con su cara".

Anónimo dijo...

Soy tipo de un sólo blog, alicia. Pero como me parece que he enviudado...

Saludos. )

beren dijo...

Me gustó especialmente su papel en DESENFOCADO, su rostro no pasa desapercibido y dota a sus personajes de una especie de espíritu maligno que los hacen muy especiales. Tengo una impresión parecida con John Malkovich.

Alicia Liddell dijo...

Pues esa no la conozco, Beren. La buscaré. Dafoe me gusta más que Malkovich, quien creo que sobreactúa con demasiada frencuencia. Me resulta más creíble Dafoe desempeñe el papel que le toque: villano, inconformista, poli ...
Y, Anilibis, volveré a ver El Ansia. La verdad es que la tengo muy olvidada, pero aunque sólo sea por ver a Bowie y a la Sarandon ya merece la pena.

Anónimo dijo...

Sí, también es uno de mis actores favoritos. Un tipo accesible, además. Sin atisbo alguno de divismo.

Es difícil quedarse con una de sus interpretaciones. Tirando de mi lado sentimentaloide me quedo sin dudarlo con el David Caravaggio de "El Paciente Inglés". En especial con aquella escena en la que muestra sus manos sin pulgares mientras dice: "Ese santo al que estás cuidando me hizo esto".

Anónimo dijo...

Hay rostros que hablan por si solos y nos cautivan porque percuten en nuestro silencio, donde todo esta por decir, y ha de tomar las riendas esa incansable nuestra que solemos llamar imaginacion para rellenar tantos orificios como presenta el silencio... Para no caernos por ellos y perder el control habitual sobre nosotros mismos. Hablamos, nada menos, que de esa escondidiza nuestra que es la emocion.

A mi tambien me sedujo de siempre este individuo, igual que Malcolm McDowell en su soberbia interpretacion de la pavloviana y beethoviana, Naranja Mecanica... O Richard Harris (en guiones no siempre a la altura de su potencial interpretativo). O de Agustin Gonzalez, por ceñirnos al ambito pata negro y patrio, del que siempre me pregunte que seria de su fuerza histrionica de no haber sido agraciado con esa occipitalidad sorprendentemente plana y alopecica que se nos asemeja como un atril mismo de nuestro magin.

Con el cine, milady, creo que viene sucediendo como en los silencios del Jazz y que Miles Davis catalogara del mas fuerte de los ruidos habidos. Por esos silencios que nos oferta la improvisacion musical, o el guion cinematografico, se cuela nuestro magin supliendo y hasta rebasando carencias directoriales o de guion que nos sugiere un rostro callado o un compas en blanco.

Abrazos fuera de guion, oiga.

Txe Peligro dijo...

una mirada maligna

Elena dijo...

Una fuerza increíble la que desprende el rostro de este actor, sin duda. Es fácil encasillarlo en papeles del malo de la película, la dureza de sus rasgos se presta a ello. Coincido con Alex en quedarme con su interpretación en "El paciente inglés", una de mis pelis preferidas.
Un saludo y enhorabuena por el blog.

El Miope Muñoz dijo...

Me encanta en arde missisipi cinta a recuperar por todos desde ya.

Isabel Barceló Chico dijo...

Desde luego, su rostro no deja indiferente. Es bastante inquietante, quizá por lo que tiene de ambiguo. Puede muy representar al mismo tiempo la luz y el lado oscuro que sin duda todos tenemos. Saludos cordiales.

Anónimo dijo...

Una de sus mejores películas es "sin posibilidad de escape" ("light sleeper"), de Paul Schrader, donde interpreta a John LeTour, un distinguido distribuidor de sustancias ilícitas... Por si fuera poco, su novia es Susan Sarandon. Es una historia extraña, dura y preciosa.

Saludos.

Anónimo dijo...

Sin lugar a dudas, te gustan las caras que tienen "algo".
Me alegra encontrar a alguien que no sólo comparte predilecciones sino que además sabe expresarlas con tanta precisión. Y me muero de curiosidad por saber quién será el próximo.

Anónimo dijo...

Acabo de recordar su interpretación en "La sombra del vampiro", una curiosa película sobre el rodaje de "Nosferatu"...

Alicia Liddell dijo...

Anilibis: He visto "El ansia" en estos días(vaya bodrio, no me acordaba que era tan mala) y sí, sale unos cinco segundos en pantalla, con una pinta de pandillero que tira p'atrás.